Momento Pentair: Maxine se enfrenta a su rutina diaria... con su particular rutina diaria
En el caso del café, la calidad del agua marca una importante diferencia y puede ser determinante a la hora de que sus clientes regresen cada día...
Otra clienta satisfecha. Maxine está lista para comenzar el día y sin duda regresará mañana. Ella sabe un par de cosas sobre química, además de tener en casa una buena cafetera. Pero también conoce sus límites y, por muy bien que le salga el café en casa, queda lejos del sabor del auténtico. Confía ciegamente a sus cafeterías favoritas la bebida que más disfruta cada día. Además, aprecia la diferencia entre el café que toma en casa y su dosis diaria en la cafetería y está más que dispuesta a pagar por ello. Ese es precisamente el motivo por el que no desean perder a Maxine ni a clientes como ella. Sin embargo, su excelencia la marca la última taza que sirven, así que la consistencia, además de la calidad, es la clave de su éxito.
Un buen agua + buen café = una gran experiencia
Cuando se trata de la búsqueda del café perfecto, la lista de ingredientes para el éxito es bastante extensa. Su barista debe garantizar ciertos aspectos como el molido de los granos, la técnica de prensado y su habilidad con la leche. Además, como cualquier buen barista podría recordarnos, el café está compuesto en un 98 % de agua, por lo que si el agua no es de buena calidad, tampoco lo será la infusión resultante. Una buena agua y, sobre todo, una buena agua de forma constante, resulta vital para brindar el mejor sabor. Pero, ¿qué hace que el agua sea buena para elaborar café, por qué es tan importante y qué puede hacer usted para mejorar la calidad de este preciado líquido?
¿Por qué es tan compleja la ciencia del agua?
En realidad no es tan duro, pero el agua sí puede serlo y su dureza podría servir de ayuda a su café. Sin ahogarnos en la ciencia, consultemos algo de química básica para comprender lo que sucede.
El agua pura, es decir, dos partes de hidrógeno y una de oxígeno, rara vez se limita a esa composición. Prácticamente siempre contiene otros elementos, tanto buenos como malos, que suma en su recorrido. Por norma general, se trata de minerales como el calcio y el magnesio, que incrementan su "dureza". Si la cantidad de estos minerales fuera excesiva, podrían derivar en calcificaciones y ocasionar daños en los equipos... como las cafeteras. Por ese motivo, solemos eliminarlos del agua mediante la descalcificación por sal. No obstante, la ciencia ha demostrado que estos mismos minerales mejoran el proceso de extracción del sabor del café, que pasa al agua. La dureza se expresa en partes por millón (ppm) y la The Speciality Coffee Association (SCA) recomienda 68 ppm como la dureza óptima para la mayor extracción de sabor. Un valor menor se traduce en una pérdida de sabor. Uno más alto no ofrece ningún beneficio en materia de sabor... lo que tampoco reviste demasiada importancia, dado que cualquier valor superior derivará en calcificación en su preciada cafetera.
Más información sobre el total de sólidos disueltos
El calcio y el magnesio solo conforman una parte de la historia. Conocidos colectivamente como "Total de sólidos disueltos" (TDS), hay muchos otros minerales presentes en el agua del grifo y que pueden afectar al sabor del café. El sodio, por ejemplo, puede añadir un cierto dulzor a la bebida, mientras que en concentraciones excesivas, sus clientes probablemente detecten un sabor salado. También puede encontrar hierro y cobre, especialmente si su edificio tiene tuberías antiguas, y estos minerales pueden dejar un sabor metálico en la boca. Si además añadimos carbonatos, cloruros, sulfatos y un pH que puedan afectar a la calidad y consistencia del café que sirve a sus clientes, todo empeora. Si aún no lo ha hecho, tal vez sea el momento de revisar el agua que mantiene a flote su negocio de café.
Hablemos del pH
Las escalas de pH miden la acidez o alcalinidad del agua: un valor inferior a siete significa que es ácida, mientras que si supera el siete, es alcalina. Esencialmente, el café es un ácido, por lo que un agua ligeramente alcalina mejora la extracción de sabor. Por otro lado, usar agua con un pH muy superior a ocho puede generar gases neutralizantes que reduzcan la velocidad del flujo de café que atraviesa la máquina. El valor óptimo de pH conforme al protocolo de puntuación SCA para el café es de 6 a 8; todo valor fuera de esa horquilla puede indicar que es hora de replantearse el tratamiento de su agua.
Verifique los componentes de su agua
En Europa, la mayor parte de las aguas municipales son potables, pero tal vez esto no le resulte demasiado beneficioso a la hora de elaborar café. Existen numerosas opciones de análisis: elija una que ofrezca resultados precisos y actualizados. Si descubre la presencia de minerales en su agua que estuvieran afectando negativamente al sabor y la calidad de su café, o al buen funcionamiento de sus equipos de elaboración de café, estas algunas opciones de tratamiento.
Tratamiento de descalcificación con sal
Este es el tratamiento de agua aplicado con más frecuencia en cocinas domésticas y comerciales. De hecho, es posible que su cafetería disponga ya de un descalcificador. No obstante, y aunque la descalcificación con sal protegerá su equipo de la calcificación, el agua blanda tampoco resulta óptima para elaborar café. Un agua sin algunos minerales que fomentan su dureza puede dar como resultado infusiones débiles y carentes de sabor.
Tratamiento de filtrado con cartuchos
Un sistema de filtrado profesional utiliza cartuchos sustituibles dirigidos a "refinar" el agua o afrontar problemas de contaminación más complejos. Estos cartuchos se encuentran disponibles en distintos tamaños y capacidades, y se disponen en el conducto de entrada previo a que el agua acceda a la cafetera. Su función es la eliminación de minerales y contaminantes, causantes de una dureza excesiva del agua, sabores extraños u olores desagradables. Además, protegen sus equipos de elaboración de café de los efectos corrosivos de la cal. Mediante el intercambio de iones, la gama de cartuchos Pentair Everpure® Claris ha sido especialmente diseñada para satisfacer los exigentes estándares de las cafeterías especializadas, y ofrecen una función de mezcla capaz de "combinar" el agua tratada con la del grifo, brindando un resultado de calidad óptima.
Tratamiento por ósmosis inversa
Impulsado por las demandas de un público cada día más exigente y por el deseo de las cafeterías de brindar la máxima calidad y consistencia en múltiples franquicias y locales, actualmente el tratamiento por ósmosis inversa (OI) es cada vez más frecuente en las cocinas comerciales. Estos sistemas están compuestos por un sofisticado conjunto de prefiltrado por carbono, microfiltrado por membrana, cartuchos de acondicionamiento y un depósito de almacenamiento. El tratamiento por ósmosis inversa consiste en neutralizar primero totalmente el agua de origen, eliminando todo su contenido, antes de volver a añadir los minerales necesarios mediante un proceso calculado y controlado. Así, la OI puede facilitar un agua de calidad óptima con la que elaborar el café perfecto en cualquier momento y lugar, repetidamente. Los equipos actuales de ósmosis inversa ocupan poco espacio, ofrecen un consumo de agua muy eficiente y son el patrón de referencia en materia de tratamiento del agua para la elaboración de café.
Si tiene un momento...
Ahora que conoce los elementos del agua cuya presencia es más deseable y cómo estos afectan a la calidad de su café, consulte la galardonada gama de soluciones de tratamiento del agua Everpure de Pentair para aplicaciones de café.
>> Gama de cartuchos Everpure Claris de Pentair
La gama de cartuchos Everpure Claris de Pentair consiste un sistema de cartuchos de cambio rápido, compacto y muy eficaz para el tratamiento del agua empleada para el consumo en cafeterías. El cabezal del sistema aloja un cartucho filtrante sustituible de cinco etapas que retiene e impide el paso de los minerales que pueden afectar al sabor del café y ocasionar daños en su equipo. Gracias a la combinación de una excelente tecnología de filtrado y a una ingeniería de primer nivel, Pentair Everpure Claris brinda un agua de calidad excelente para la elaboración de café, repetidamente.
Si desea disfrutar de un rendimiento integral, opte por Everpure Claris Ultra, mientras que si busca lo mejor en filtrado de cartuchos, conozca Everpure Claris Prime.
La tecnología de ósmosis inversa de Pentair es el patrón de referencia en el tratamiento del agua para cafeterías. Este sistema fuerza el paso del agua a través de una membrana semipermeable que separa las moléculas de agua de los minerales, las sales y las trazas de metales a un nivel imposible de alcanzar únicamente con el filtrado por carbón. Además, un cartucho filtrante de calcita y una válvula de mezcla permiten a los usuarios especificar el contenido mineral exacto que desean encontrar en su producto final.
>> Visítenos en la feria World of Coffee
Conozca Everpure Claris Prime, los sistemas de ósmosis inversa de Pentair y a otros miembros de la familia de tratamiento del agua Pentair en la feria World of Coffee, que se celebrará en Milán en junio de 2022.
